Existen otras estructuras para las que hay que construir túneles.
Por ejemplo, se han construido túneles en pistas de esquí como las de Tignes, Val d'Isere o 2 Alpes, en Francia, o Saas Fee y Zermatt, en Suiza, para facilitar el acceso del transporte colectivo hasta la montaña.
Estos túneles presentan fuertes pendientes, pero son capaces de garantizar un acceso seguro y rápido a las pistas, independientemente de las condiciones meteorológicas.
En Saas Fee, por ejemplo, el túnel conocido popularmente como el “metro alpino”, inaugurado en 1985, es el funicular subterráneo más elevado de los Alpes, y conecta Felskinn con Mittelallalin a una altitud de 3500 m.